lunes, 23 de julio de 2012

Diario de viaje: Granada. La estación

La estación de tren. Es un sitio interesante y escalofriante a la vez. Miles de personas vienen y van de un lado para otro, de un lugar a otro. Nadie conoce a nadie y parece que nadie cuida de la estación. Los empleados que trabajan en ella tienen una vida fuera de ella y otra, más o menos diferente dentro.
Da miedo pensar que un lugar tan grande estuviera desierto, sin personas, sin nadie que pisara sus andenes, que se riera en sus bancos, que se reencontrara con familiares y amigos, que discutiera o se enfadara, o que se besara en su entrada principal. Ninguna de estas personas recordará la estación pero en el fondo siempre estará en sus recuerdos, y ella nunca olvida a nadie. Siempre recuerda a las personas que le dan vida.
Dentro de poco parto hacia Granada, y es por eso que ahora empiezo este diario de viaje, en el que relataré mis experiencias en la antigua ciudad árabe.
El viaje está a punto de empezar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario